Fantasia 3. En la ducha...
En el autobús numero doscientos veinticuatro, que me lleva a casa desde el trabajo tras un día mas de trabajo rutinario y aburrido, la gotas de lluvia otoñal que resbalan por el cristal captan toda mi atención, me han dado una idea y esa idea va tomando forma en mi cabeza mientras las paradas se suceden. Al llegar a la mía desciendo del autobús sin molestarme en abrir el paraguas, la lluvia no tarda en chorrearme por el pelo, no me importa, tengo algo mejor de lo que preocuparme. No tardo en llegar a mi piso, en el portal me encuentro con la vecina del segundo, la típica cotilla de escalera que hay en toda comunidad que se precie, no me cae bien pero la saludo con una sonrisa, es lo que tiene tener buenas ideas. Subo con ella en el ascensor agradeciendo que no me cuente alguna de sus historias, tendría que interrumpirla, tengo prisa.
Cuando el ascensor se detiene en el sexto piso, me bajo y camino hacia la puerta del piso, antes de abrirla, el sonido de música rock me llega a los oídos, dos vueltas de llave y la puerta se abre. Me seco los pies en la alfombrilla de bienvenida, aunque en esta no se encuentra grabada esta típica palabra, dejo las llaves en la mesa de la entrada y cierro la puerta con un suave golpe de tacón.
Camino hacia la música dejando a un lado y al otro cocina y sala de estar. Me detengo ante el dormitorio, esta tumbada de espaldas leyendo un libro, lleva puesta una camiseta y un pantalón de pijama. Ella se gira para saludarme.
- Hola amor ¿ que tal el día?- dice mientras se incorpora.
- Una mierda, voy a darme una ducha, no te levantes. - el día no ha sido una mierda solo aburrido pero el tono con el que lo digo y el que vaya directamente a la ducha refuerzan mi pequeña mentira.
Llego al baño, abro la ducha para que el agua vaya calentándose mientras me desvisto rápidamente, si la conozco bien no tardara en aparecer. Me meto debajo de la ducha y el agua caliente cae sobre mi piel, tengo los ojos cerrados cuando oigo de nuevo su voz.
- Cariño, ¿estas bien? - me pregunta preocupada.
- Abro los ojos y sonrió- le hago un gesto con el dedo para que se acerque.
- ¿Que?- pregunta ella sorprendida.
- Si te duchas conmigo estaré mucho mejor le digo mostrando mi mejor cara de niño bueno. Ella entorna los ojos y me mira, se ha dado cuenta de que solo la he preocupado con el fin de hacerla venir. Me hace un mohin, pero se quita las zapatillas y comienza a bajarse los pantalones.
- Déjate el resto- le digo. Me vuelve a mirar extrañada.
- Dejatelo- repito.
- Estas loco.- contesta ella pero se mete en la ducha con la camiseta y la ropa interior. Cuando se mete la abrazo y la acerco contra mi, el contacto con su piel me provoca una erección comienzo a besarla mientras el agua nos cae encima. Mi lengua busca la suya con ansia y se introduce dentro de su boca, allí se junta con la suya en un baile sin coreografía, guiado por el deseo. Me aparto un instante de ella para mirarla, sus ojos brillan, sus mejillas tienen ese rubor que la pasión le pinta.
- Me pones mucho- le digo con la voz ronca y luego lamo su boca y me aparto de ella, ella se acerca para lamer la mía pero me aparto y le sonrió. Ella murmura imperceptiblemente un insulto que aumenta mi erección. La agarro y pongo su espalda contra su pecho, mi pene queda pegado a su culo, le aparto el pelo, muerdo su hombro ella gime, luego comienzo a besar su cuello dejando salir mi lengua para rozarlo levemente, noto como su respiración se agita cada vez mas, cuando lo muerdo vuelve a gemir, esta vez mas fuerte. Bajo la mano que tengo rodeando su cintura hasta su ropa interior y comienzo a bajarla, ella me ayuda levantando las piernas, cuando nota mi polla caliente rozar su culo suspira. Yo me pego mas a ella para que note lo dura que esta, lo caliente que me pone. Le hago separar un poco las piernas para meter mi mano entre las mismas. Comienzo a acariciar su clítoris mientras que con el otra brazo la apretó fuertemente contra mi, cuando noto que esta muy caliente, meto dos dedos en su sexo y comienzo a moverlos.
-Joder..-dice ella.- Sus gemidos me excitan cada vez mas pero tengo ganas de ser malo.
- ¿Por cierto desde cuando no llevas sujetador?- le pregunto mientras descuelgo la ducha y cierro el agua caliente.
- Me..duche hace un rato..y ya no me puse.- logra articular ella. Justo cuando acaba de decirlo dejo caer el agua fría sobre sus pechos, en seguida noto sus pezones sobresalir, ella se agita pero yo la agarro con fuerza.
-Cabrón- me repite.
- Lo soy- admito. - pero ahora te los caliento. Le saco la camiseta con ansia, me quedo mirando un instante sus pechos, cojo uno con una mano y lo acaricio, lo aprieto mientras miro su rostro de placer, pongo mi otra mano sobre el otro mientras acerco mi boca a uno de sus sonrosados y duros pezones. Lo muerdo con delicadeza, lo chupo, muevo la lengua dentro de mi boca, por ultimo lo succiono. Cuando retiro mi boca, esta algo mas oscuro. Repito la operación en su otro seno, mientras con mi mano le apretó con fuerza el otro. Ella gime cada vez mas y yo estoy ya muy cachondo. La vuelvo agarrar para darle la vuelta, la empujo contra la pared, me acerco a su oído y le susurro.
-Te voy a follar- mientras la obligo a sacar un poco el culo. Agarro mi polla con una mano y la paso por todo su culo de arriba a abajo, cuando estoy en la entrada de su coño rozo con el glande su clítoris.
- Metemela-pide ella. Cuando lo dice meto mi polla con fuerza, ella da un pequeño grito cuando la nota entera dentro suya. Me quedo quieto unos instantes sintiendo como la humedad y el calor de su sexo envuelven mi polla. Luego pongo mis manos en mis caderas y comienzo a moverme en su interior, ella gime con las manos apoyadas en la pared, subo las mías y las pongo sobre las suyas mientras aumento el ritmo. Pego mi boca a su oreja y le susurro.
-¿Te gusta?-
- Si....joder- me contesta ella, mientras yo muerdo su cuello. Tras un minuto mas embestiendola, me detengo.
-No pares- grita ahogadamente. - Me encanta oírselo pedir, yo la embisto con fuerza y pausadamente, con todas mis ganas. Una, dos...diez veces. Luego vuelvo a metersela mas rápido, le doy un par de azotes en el culo que la encienden aun mas si cabe. Agarro sus nalgas y las separo para ver mi polla entrar en su coño, ella se excita al saber que miro.
Percibo que esta apunto de correrse y acelero mis embestidas, deseo correrme junto a ella. El orgasmo nos llega a la par haciéndonos gemir y gritar, noto mi esperma llenarla, me encanta esa sensación y se que a ella también. Cuando el orgasmo termina apoyo mi cabeza sobre su hombro recuperandome mientras la escucho respirar agitadamente.
Me aparto de ella y la beso, sus labios arden como los míos sin separar mi boca de la suya, muevo una de mis manos hacia su sexo, se que puede correrse otra vez y quiero que lo haga. Mientras la masturbo la beso, me separo para mirarla y vuelvo a besarla. Me encanta ver su cara de placer, mas aun cuando se corre, cada gesto, cada sonido que se escapa de su boca me encanta. Cuando termina de correrse abre los ojos y ve que la estoy mirando. Se pone colorada y yo la beso dulcemente.
-Estas preciosa cuando te corres- le digo, ella se sonroja aun mas y entierra su cabeza en mi pecho. Yo beso su cabeza y la dejo descansar un rato sobre mi.
De pronto me doy cuenta de que la bañera esta casi llena y comienzo a reírme mientras me doy prisa por parar el agua. Ella me mira cuando me oye reír y observa la bañera llena.
- Por los pelos dice sonriendo-
-Morena, te invito a un baño.- le digo yo mientras la agarro para sentarnos en la bañera, con ella delante.
La abrazo con fuerza mientras el agua caliente nos cubre..
..al rato cojo el gel y dejo caer un chorro sobre mi mano, luego me las restrego y las pongo sobre sus pechos, ella se estremece un poco ante el contacto frió del gel y el cálido de mis manos. Comienzo a masajearlos y le susurro.
- Siempre quise enjabonarte las tetas.
-Mmmm- hace ella con los ojos cerrados. - ¿Por cierto y esta idea?- me pregunta.
-Me inspiras, cielo, me inspiras- respondo.
2 comentarios:
de pronto me apetece una ducha más que nada... no se por qué... ains...
es genial y la ducha una maravilla
Publicar un comentario