Un gesto.
Acercó su mano
lentamente hacia ella , contemplando sus ojos, siempre expresivos, su pequeña
nariz, su atractiva boca. Rozó su pelo, y se lo retiró detrás de la oreja, ella
le sonrió con aquella sonrisa preciosa, sus pómulos se redondearon, el noto su
pecho latir con fuerza y le devolvió la sonrisa. En ese instante, con ese
simple gesto, se sintió feliz.
2 comentarios:
Los simples gestos siempre me han parecido los mejores.
Feliz, bonita palabra.
Gracias por volver a escribir.
con solo una mirada... con solo una palabra... (no es plagio lo mio, no...)
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